Un Betis muy amarillo.

Pepe Mel anda dándole vueltas no sólo al once inicial que opondrá al Villarreal el próximo sábado (18:00), sino a la confección de un banquillo para el que tiene mimbres de sobra y en el que habrá descartes sonados. Seguramente, entre ellos no se hallen Matilla, Jonathan Pereira ni Jefferson Montero, a quienes une su pasado en la entidad levantina. Es más, los tres aterrizaron en el Betis procedentes de forma directa de la localidad castellonense, aunque en el caso del ecuatoriano medió una cesión al Levante. El técnico madrileño ya demostró en Santander ser partidario de buscar la motivación extra que suelen tener los futbolistas cuando se miden a los equipos en los que militaron recientemente. En aquella ocasión introdujo en el once inicial a Jonathan Pereira, muy recordado por su buena labor en el Racing, en el que triunfó en una de sus cesiones y con el que jugó la UEFA. El menudo atacante gallego, que había jugado días antes los minutos finales en Cornellá, saltó al césped como integrante de una delantera de bajitos que completaron Pozuelo y Rubén Castro, quienes hoy continúan en el once titular. En principio, ninguno de los tres ex amarillos será titular en su vuelta a casa, la segunda ya para Jonathan Pereira, quien la temporada anterior participó 45 minutos en la derrota del Betis (1-0) frente al Villarreal B, la primera de la etapa crítica que conllevó a otras cuatro más. Pero la idea de Mel es que los tres se sienten a su lado en el banquillo, sobre todo si Jefferson Montero arriba mañana en buenas condiciones tras el partido de anoche en Quito entre Ecuador y Perú. 

Matilla 

Javier Matilla, de 23 años, llegó al Betis el pasado verano tras cuatro temporadas en Villarreal, adonde llegó procedente del Albacete juvenil junto a un grupo de futbolistas del mismo equipo que había triunfado y que la pareja Roig-Llaneza incorporó para su cantera. Durante los tres primeros años triunfó en el Villarreal B y quien fue su técnico, Juan Carlos Garrido, lo subió la temporada pasada al primer equipo. Paradójicamente, apenas contó con él y así recaló en el Betis, que pagó por su fichaje una cantidad aproximada de 1.350.000 euros. Con esta vitola, la de fichaje estrella, ha aterrizado en el Betis y otros factores bien distintos le han impedido a la fecha rendir a satisfacción. Entró con mal pie, pues unas extensas vacaciones lo llevaron a poner unos kilos que, por fortuna, ya se ha quitado. La dura competencia se le hizo, por ello, un mundo. Matilla, a la fecha, sólo ha jugado 70 minutos repartidos en cuatro partidos. Empero, en los dos últimos ha entrado como suplente. Pepe Mel lo ve mejor físicamente que cuando llegó e incluso que cuando le dio la camiseta de titular en Getafe, pero no como para darle de nuevo su confianza desde el inicio. Ésa se la tendrá que ganar el futbolista, a quien su técnico solicita más ritmo con el balón, pases más largos y de más riesgo y que no tienda a jugar excesivamente cerca de los centrales. Dicen quienes mejor lo conocen que tiene el duro. Pues él debe cambiarlo. 

 Jonathan Pereira

Con sólo 24 años, hace ya nueve que llegó al Villarreal como juvenil. Deslumbró por su chispa y su capacidad para hacer gol (29 en dos temporadas) en el filial, pero se le atragantó el primer equipo y fue cedido a dos equipos con idéntico nombre, Racing, el de Ferrol y el de Santander. Triunfó en ambos, con los montañeses en Primera, y regresó al equipo amarillo, pero en diciembre de 2009 recaló en el Betis: 22 partidos de Liga y 9 goles con Víctor Fernández en media temporada y 18 partidos y 3 goles en un período similar el curso pasado tras superar una grave lesión de cadera. A la fecha, lleva este curso 9 partidos (400 minutos) y aún no ha marcado. "El Villarreal jugará con ansiedad porque es un equipo grande, hecho para la Champions y se ve abajo. Si no va ganando, le puede entrar ansiedad y habrá que aprovecharse. Creo que nos favorecerá la situación negativa por la que atraviesa", dijo ayer el jugador, que añadió: "No me lo tomo como una revancha, no tengo que demostrar nada a nadie. Estoy muy contento de estar aquí y de volver a mi casa, pero no me lo tomo como algo personal". 

Jefferson Montero 

El ecuatoriano, de 22 años, llegó de su país directamente al club levantino. Al igual que Matilla, de quien fue compañero, triunfó en el filial y la temporada pasada, mediada la campaña, fue cedido al Levante, que lo pretendía este año. El Betis pujó más fuerte y logró su cesión. Comenzó como titular, pero ha ido perdiendo fuelle y desaparecido de las alineaciones y, al igual que Pereira, es hoy un revulsivo por su velocidad. En total, ha jugado 486 minutos en nueve partidos y no ha marcado.