El técnico que sustituyó a Valverde en el banquillo del submarino, hace ahora casi dos años, sabe que tiene un ultimátum en su partido con el Villarreal en el Bernabéu y frente al Rayo en El Madrigal el próximo sábado.
Dependiendo del balance de Garrido en estos encuentro, podría ser destituido antes incluso del partido de Champions ante el Manchester City. Roig y Llaneza, que nunca han sido partidarios de las destituciones traumáticas de los entrenadores, tienen muy claro que el futuro del Villarreal en la Liga de Campeones está más que complicado, pero quieren que el equipo intente asegurarse el tercer puesto para entrar en la Europa League.
Además, los rectores del club villarrealense pretenden encarrilar cuanto antes la marcha del equipo en la Liga y, por si fuera necesario tomar una decisión drástica, ya han elaborado una lista de sustitutos para Garrido y el candidato preferido es Míchel. Incluso han establecido ya contactos con algún técnico.
El ex entrenador del Getafe, ahora sin equipo, cumple todos los requisitos que busca el Villarreal: un técnico joven, perfecto conocedor de la cantera, que apueste por el buen fútbol y sea capaz de soportar la presión de entrenar a un equipo con aspiraciones de Champions.
El segundo en la lista es Víctor Fernández, otro de los ilustres en el paro, cuyo nombre ha sido manejado en más de una ocasión. Otros entrenadores que gustaban eran Quique Flores, descartado por su elevado caché, y Michael Laudrup, que no puede entrenar esta temporada en España tras haber sido destituido en el Mallorca. Según adelanta Marca El nombre del técnico del filial, José Francisco Molina, sólo se contempla como solución interina de urgencia.
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